Publicado en Yahoo Noticias
En la política argentina hay figuras que ocupan un rol central, inversamente proporcional a la exposición pública que ostentan. Es el caso de Carlos Zannini, secretario de Legal y Técnica, un hombre clave en el kirchnerismo y en la política nacional, pero con una imagen casi nula en la opinión pública: muchos ni siquiera saben en qué consiste su trabajo.
Sin embargo, su rol en el armado kirchnerista ha sido fundamental: “Sos más cristinista que yo”, le dijo un día Néstor Kirchner, un poco en broma, un poco en serio. Compañero político desde la intendencia de Río Gallegos del expresidente y la gobernación en Santa Cruz,“El Chino” siempre le puso su impronta a la gestión política del matrimonio más relevante de la política de los últimos diez años.
“Carlos Zannini es el príncipe de Cristina detrás de escena y fue la sombra de Néstor”, cuenta Eduardo Zanini, periodista que investigó la vida del funcionario -y que pese a la similitud de su apellido, no tiene nada en común-. Algunos hasta le adjudican ser el soporte emocional de Cristina Kirchner: “Quienes conocen de cerca la relación entre la Presidenta y Zannini afirman que, con una sola mirada, con un cruce de guiños disimulados, es suficiente para saber qué piensa cada uno o qué tarea hay que ejecutar al instante“, explica.
Desde su detención en 1975 en Córdoba hasta el rol central que tiene en la política nacional actual, Zannini se movió siempre en las sombras (a pesar de ser un envidiable orador). Su pensamiento, su historia y su forma de entender al “modelo”, entre otras cosas, quedaron plasmados en “El Creador”, una biografía sobre “el verdadero cerebro del kirchnerismo”.